Esta clase de higo procede de México y llegó a Europa en los primeros barcos que hacían las carreras hacia India Occidental. Se trata de una planta rústica de la familia de los cactus y puede llegar a medir más de 2 o 3 metros. 

En Sicilia y zonas áridas de Andalucía forma parte del paisaje silvestre y de las estampas más típicas. Los agricultores locales utilizaban las chumberas como vallado, para delimitar las fronteras de sus propiedades.

Los higos chumbos maduran en pleno verano y su carne tiene un color verdosos claro, amarillento o anaranjado. En cuanto a las semillas, se encuentran dentro de la pulpa y no deben consumirse. 

Este fruto es ligeramente astringente pese a su riqueza en fibra. Aporta buenas cantidades de magnesio y calcio junto con el abundante contenido en Vitamina C y otras sustancias antioxidantes. Entre estas sustancias antioxidantes destacan las betalaínas, los mismos pigmentos que dan un tono rojizo a la remolacha y que los estudios relacionan con una menor oxidación del colesterol LDL.

Lo habitual es consumir el higo chumbo fresco, como una fruta de mesa o cortado en la Macedonia junto a otras frutas de verano, pero también se pueden elaborar mermeladas, confituras o sorbetes

En cuanto a las pencas de la chumbera, que por cierto, se pueden comer. Es más, en países como México es habitual prepararlas como verduras. Son ricas en mucílagos por lo que evitan la absorción de parte del colesterol ingerido y la conversión en grasa del exceso de azúcar en la sangre.

Es temporada óptima de este fruto, ¿a qué esperas para disfrutar de su sabor tan cristalino, fresco y rústico? Ven a cualquiera de nuestras tiendas de El Mercado de la Fruta y disfruta de las frutas y verduras más frescas del mercado. En León, somos tu frutería de confianza.